El monóxido de carbono no se toma vacaciones


¿También en verano?

Si bien los cuidados en relación a la presencia de monóxido de carbono en los hogares suelen ser tenidos en cuenta con mayor rigurosidad durante el período invernal donde se utilizan las estufas para calentar los ambientes, es sumamente importante aclarar que muchos de los accidentes que ocurren en los meses de verano en las zonas turísticas son provocados por la falta de mantenimiento de las instalaciones de los artefactos que funcionan a gas natural y de sus ventilaciones.

Suele suceder que algunas propiedades permanecen cerradas y sin uso durante gran parte del año, y, por tal motivo, las ventilaciones se deterioran, o los pájaros construyen sus nidos y tapan los conductos de evacuación de gases al exterior.

Durante el verano seguimos utilizando artefactos que funcionan con gas como el horno, las hornallas y el termotanque o el calefón, que pueden producir monóxido de carbono, si no está asegurada la suficiente llegada de oxígeno al quemador.


Antes de iniciar las vacaciones en una casa de veraneo, hacé revisar las instalaciones de gas por un gasista matriculado. Ellos son los únicos que pueden realizar reparaciones o modificaciones de artefactos y sus ventilaciones.


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